Como paso mucho tiempo escribiendo, utilizo muchos bolígrafos y libretas, y detrás de todas las hojas de cada libreta tengo una hoja llena de garabatos porque muchas veces los bolígrafos dejan de pintar y tengo que hacer rayajos detrás para que de nuevo funcione. ¿Nunca os ha pasado?
Ya sé que esta entrada puede parecer absurda (de hecho, lo es), pero me encanta escribir todo y como esta mañana me he revelado contra un bolígrafo, pues he decidido escribirlo.
Muchas veces se me ha ocurrido una frase y digo, voy a escribirla! y no logro encontrar un boli que pinte decentemente...
También hay veces que estás hablando por teléfono y tienes que apuntar algo importante y el boli que hay al lado no funciona, y siempre te ocurrirá en el momento menos oportuno.
Lo peor de todo es cuando en clase toca hacer un dictado y el boli decide jorobarte... tienes que pedirle a la profesora que pare el dictado un segundo y pedir que te presten otro boli... ¡Que rabia!
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